Plan de cooperativismo de viviendas de trabajadores sindicalizados llegó a la entrega de 2000 viviendas

Desde hace 6 años, Uruguay lleva adelante un plan de cooperativas de viviendas integradas por trabajadores sindicalizados que ha tenido mucho éxito y que prácticamente no se lleva a cabo en otro país. Este fin de semana, con la entrega de 35 viviendas a trabajadores de la Policía y de la Enseñanza Pública, se llegó a las 2000 viviendas construidas en todo el país gracias al cooperativismo sindical.  

Este sábado 22 de octubre, a las 12:00 horas en Santa Lucía (Canelones), 35 familias pertenecientes a la cooperativa Covitraun, accedieron a sus viviendas con la ayuda del Programa de Vivienda Sindical y al CET PVS. 

Se trata de casas construidas con el sistema no tradicional Forza, uno de los cuatro que utiliza el CET- PVS, de las cuales dos de ellas son de 4 dormitorios; 20, de 3 dormitorios; y 13, de dos dormitorios. 

En cuanto a la conformación, de las 35 familias beneficiarias, 23 de ellas están integradas por madres jefas de hogar.

Se trata de una cooperativa que surgió en 2011 y que en un principio nucleó a trabajadores del sindicato policial, pero luego se sumaron también trabajadores de la Enseñanza Pública (SINTEP).

El presidente del Pit-Cnt, Marcelo Abdala, dijo sentirse emocionado por la alegría de las familias al recibir sus casas. 

“Esto viene a reafirmar que tanta lucha, tanto esfuerzo, vale la pena, y que el Programa de Vivienda Sindical vino para quedarse”, aseguró Abdala y dijo que el Programa nació como una idea de combinar nuevas metodologías constructivas que disminuyen el precio del metro cuadrado de construcción, con la comunidad que da la ayuda mutua y la cooperativa, con el objetivo de resolver uno de los problemas de la familia trabajadora, que es tener viviendas de alta calidad, a un precio por debajo del alquiler y un plazo de entrega adecuado”, expresó Abdala. 

En cuanto al programa, informó que se está “desarrollando de manera trascendente en todo el país. “No hay muchas experiencias en el mundo que puedan ejemplificar esta labor, que ya llega a 2000 familias, y se prevé que siga creciendo”, sostuvo. 

Por su parte, Adriana Díaz, integrante de la cooperativa, se mostró emocionada por poder alcanzar su vivienda tras 11 años de lucha. “He logrado tener la llave de mi casa. Sentimos mucha emoción, porque fueron años de lucha. Son muchas emociones juntas”, afirmó.